Probablemente
han escuchado el dicho que no solo te casas con tu esposo, sino también con su
familia. Mientras que no estoy completamente de acuerdo con tal dicho,
ciertamente hay algo de las relaciones con los suegros que puede ser muy difícil. Incluso el Papa
Francisco aludió a lo mismo con una broma sobre las suegras en un discurso en
el Encuentro Mundial de Familias.
Yo he sido
bendecida con suegros maravillosos con los cuales me llevo bien (o al menos si no les caigo bien, no estoy
consciente de ello) y sé que a mi familia le encanta Juan. Y las dos familias
respetan nuestra autonomía como familia nueva independiente.
Sin embargo,
ha sido un ajuste interesante volverse nuera y yerno a la vez que hombre y
mujer. Para mí personalmente, sé que mientras Juan y yo salíamos, pasó mucho
tiempo hasta que dejé de sentir como la chica extranjera cuando pasamos tiempo
con su familia y empecé a sentir como parte de la familia. No fue solo tema de
ajustarme al modo de ser de otra familia sino también ajustar me la lengua y
cultura. Por ejemplo, cuando nos conocimos por la primera vez, no podría
entender al papá de Juan que habla con una variedad más rural del español
chileno, y muchos de los platos que hizo su mamá nunca había visto antes ni
sabía cómo comer, provocando algunos momentos cómicos al momento de almorzar.
Aunque diferencias pueden ser un buen tema de conversación, también te
previenen de sentirse en casa.
Pero con
tiempo, los Aguilera se empezaron a sentir como familia, y ahora que Juan y yo
nos casamos, son familia.
En Octubre
con la visita del Papa a los Estados Unidos y el Encuentro Mundial de Familias,
teníamos mucho en que reflejar en términos de la vida familiar y su centralidad
en la humanidad y sociedad. Como el papa dijo en su discurso, la familia es un
lugar privilegiado de amor y humanidad, y una “fábrica de esperanza,” aun con
sus dificultades.
Después de
todo, uno no elige a su familia, y aunque sí elige su esposo, no elige su
familia tampoco, y uno no tiene ni idea como van a ser las personalidades y
temperamentos de sus futuros hijos. Sin embargo, estamos llamados a amar a toda
nuestra familia tal como es, tal como Dios nos la da. Como al Papa le gusta
decir, los platos pueden volar, y no sorprende cuando tantas personas de tantas
personalidades distintas son mezclados juntos, pero la familia es siempre
familia y como dijo el Papa, en la familia siempre hay luz.
Aquí en Chile
hace un par de meses celebramos el día de independencia (18 de Septiembre) que
es un feriado legal en que se reúnen las familias para comer platos
tradicionales y celebrar. También fue la primera vez desde que nos casamos que
vimos mucha de la familia extendida de Juan. Fue raro que aunque no hubo nadie
allí que no había conocido antes, esta fue la primera vez que era realmente
parte de la familia en una celebración así. Estas personas serán los abuelos,
tíos abuelos, tíos, y primos de nuestros futuros hijos, y todas muy distintas a
mi propia familia en Wisconsin. Dinámica familiar distinta, lengua distinta,
cultura distinta, personalidades distintas, ideas distintas sobre cómo debería
ser la familia, pero familia no obstante.
Juan y yo
sentimos muy bendecidos por tener el apoyo de nuestras familias y mientras que
las relaciones con los suegros pueden ser (y ha sido) un desafío es una alegría
aun mas grande ver a tu familia duplicarse cuando haces tus votos, ganando
muchas más personas para amar y apoyar y te aman y te apoyan a ti.
¡Damos
gracias a Dios por nuestras familias! Qué nosotros y todas las familias
crezcamos en amor y nos volvamos en las familias fuertes que el mundo tanto
necesita.
Por Megan y Juan
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